Comenzamos la jornada con una milonga vermú matutina en la plaza de San Pedro Nolasco. El recital de Tango canción a cargo del “Dúo Atípica Tango” nos hizo pasar un tiempecito delicioso entre canciones, relatos y anécdotas que hicieron que tangueros y paseantes se parasen para disfrutar de un espectáculo improvisado con mucho sabor argentino, con notas y tangos conocidos, ayudándonos a olvidar el cansancio que comenzábamos a acumular tras la milonga de la noche anterior, animándonos a bailar. Después, continuó la fiesta con una milonguita amenizada por nuestro socio musicalizador Tommy Liviu.

En la tarde, continuamos con “la Milonga de los discos negros” que nuestro socio y musicalizador Jesús García Anadón condujo con maestría en tandas de sabor porteño salidas de los sonidos del vinilo, que para muchos sigue siendo el sonido que reconocemos de toda la vida, unos sonidos diferentes que bailamos sin parar en una tarde armónica y amigable donde todo transcurrió de manera distendida y natural.

En la noche, la milonga multitudinaria nos llevó en volandas por un camino de disfrute evocador y emocionante. Desde Buenos Aires, Daniel Losino musicalizó la primera parte de la milonga con tandas al más puro estilo de allá. Después, la orquesta Sonder Tango requirió toda nuestra atención para bailar unos temas llenos de energía y fuerza creativa que nos hicieron disfrutar de “lo lindo”. En la última parte de la milonga musicalizó nuestra socia Susana Rebolledo con esos temas que bien sabe, nos gustan, elevando al máximo el placer de bailar y compartir emociones, música y abrazos hasta las 4 de la madrugada.